Con base en la teoría de las Estructuras Sociales de Acumulación se demuestra cómo las reformas para solucionar la crisis endémica de la justicia en Colombia entre 1990-2012, se han desarrollado simultánea y dialécticamente con la introducción del nuevo modelo económico de corte neoliberal. Ambas reformas estuvieron influenciadas y cofinanciadas por organismos multilaterales como el BID, que definieron los criterios de las reformas a la justicia centrados en la defensa de los intereses de capital. Esto coadyuva a explicar porque dichas reformas a la justicia fracasaron.