El presente artículo de investigación pretende analizar cómo, a pesar de la creación de la Constitución Política de 1991 donde se abrieron espacios de participación democrática para todos los sectores políticos, incluidos los movimientos de izquierda y los grupos guerrilleros desmovilizados para el momento, y cómo a pesar de las garantías y la participación política que la misma Constitución Política le da a estos partidos.