En este artículo se realiza un análisis de la arquitectura religiosa contemporánea, explorando la trascendencia de los conceptos de diseño modernos y como a través del diseño urbano, arquitectónico y constructivo se evocan estas determinantes para la creación de espacios sensitivos y perceptivos para la comunidad dentro de un edificio de culto. El proyecto se enfrenta al peso histórico, de plantear una construcción sacra y se expone como una propuesta contemporánea donde el edificio se piensa, se concibe y se compone como un hito en el trazado urbano. Se presenta como una pieza artística que construye paisaje.